La ropa de trabajo, históricamente, ha servido como distintivo tanto de áreas profesionales como de estatus sociales. A lo largo de nuestra historia, como cualquier sector textil, la ropa para trabajo ha evolucionado con las tendencias.
Hoy en día los uniformes de trabajo, además de un distintivo para el empleado, son parte de la identidad corporativa. Forman parte del todo de la empresa y dependen, en gran medida del público al que se dirigen y la tendencia en moda.
Por ejemplo, dentro de una misma empresa las camisetas de trabajo en Alicante, quizás difieran de las de Madrid ¿Por qué? Si la moda en ambas ciudades son distintas, los uniformes probablemente lo sean. Además, si tu empresa es hostelera y siguiendo con el ejemplo de antes, no vestirás igual a tus camareros en Madrid como en Alicante. Quizás el pantalón de trabajo de Alicante, si estás en zona costera, puede tener un estilo más playero y desenfadado porque su entorno “lo pide”. Como ves, el uniforme es una manera de dirigirte a tu público de forma no verbal.